AYUDADOS POR DIOS

 Mateo 6:32-34

Establecer a Dios como prioridad en nuestra vida, poniendo primero las cosas de Dios, hará que tengamos la seguridad de su promesa de ayudarnos en nuestra necesidad.
Si queremos la ayuda de Dios entonces pongamos primero a Dios. Si queremos el milagro de Dios en nuestra necesidad, si queremos los milagros de Dios en nuestro caminar, entonces pongamos a Dios primero en nuestra vida.

Cada día puede venir con una tarea, un esfuerzo, una decisión, una dificultad, una necesidad, una debilidad, una presión y aún una maldad.
Pero cada día, si ponemos a Dios primero, él vendrá con su ayuda. Vendrá con su ayuda de provisión pero también traerá su perdón y su protección (Mateo 6:11-13).

Pongamos nuestra vida en sus manos en total dependencia de él. Él es nuestro Dios y Salvador y el Señor, y no nosotros. Busquémoslo para ponernos a su servicio, para saber que podemos hacer por él, que quiere él que hagamos, y no tanto para usarlo para nuestros proyectos personales.

Pidamos a Dios que sea él quien gobierne y dirija nuestra vida y no nosotros. Pidamos que nos ayude a vivir llevando a la práctica su palabra y que podamos caminar en santidad. Pidamos que hagamos lo que es justo con los demás, ayudando al necesitado, llevándoles el evangelio a los que no lo conocen.

No solo es beneficiarnos sino también servirle.

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